lunes, 5 de noviembre de 2012

Ahora todo es bullying

Follow my blog with Bloglovin Aunque normalmente escribo acerca de situaciones que surgen de mi ronco pecho, el día de hoy mi blosh está dedicado a una de mis más fieles seguidoras, no, no es mi mamá, no, tampoco mis tías, ¿qué creen que nomás ellas me leen? Pues nooooooo. Es una fiel seguidora que me pidió hablar del bullying y yo toda una doctora corazón le prometí que escribiría dedicado a este mal que tanto vive nuestra sociedad.

Según la definición de la Enciclopedia libre, Wikipedia (porque aquí todo está científicamente comprobado) el bullying se define como "una especie de tortura, metódica y sistemática, en la que el agresor sume a la víctima, a menudo con el silencio, la indiferencia o la complicidad de otros compañeros".

Por si no lo saben, existen varios tipos de bullying, el cyberbullying que se da en internet y el mobbing, que es lo mismo, pero en el trabajo.

Así, de un tiempo a la fecha, este término se ha vuelto muy popular y todos creen vivir este acoso por el sólo hecho de que ahora está "in".

Entiendo que sí existen niños que sufren por la tortura de sus compañeritos, o sea, en mis tiempos se llamaba "carrilla" y de ahí nació la frase "los niños son muy crueles". Sé que la crueldad de los niños ha avanzado a las redes sociales y que esto ha provocado que algunos pierdan la autoestima y hasta lleguen al suicidio, pero, ¿saben qué? la mayoría de los casos son exagerados.

Pero, no es de los niños de quienes quiero hablar, porque ni experta ni madre ni nada, así que antes de que alguna persinada me llame perra frígída y que desee que a mi hijo le hagan bullying les cambiaré a los adultos.

Por alguna razón, los peludos se creen morritos de primaria y creen que la gente les hace bullying. Por culpa de este termino del mal, la gente anda muy sensible y se toma todo a pecho, no sé quién demonios les dio tanta autoestima, que no aceptan que les digan las cosas sin pelos en la lengua.

Ahora uno tiene que andar cuidando lo que dice porque no vaya a ofender a un hijo de vecino, ahora ni siquiera a los amigos le puedes decir que se le bien "Kool ay" una blusa, porque se agüita. ¡No papacitos y mamacitas! No es mi culpa de que en sus tiempos de primaria no se usará el término y que ahora quieran sacar sus traumas del pasado. Ya están bastante grandes para decidir si toman o no una crítica y sin enojarse. No te vas a sentir mal y reclamarle a alguien nomás porque te quedó el saco con un status malvibroso de Facebook, o sea, insisto, tu tan "elevada autoestima" te hace creer que eres el centro del universo, cuando en verdad a la gente le encanta el drama.

Por lo menos, deberías dirigir esa "elevada autoestima" (mejor conocida como tu inseguridad tremenda, pero a la vez el ánimo para no dejarte criticar), en una verdadera "autoestima de buen político o famoso", la cual se nutre de que la gente diga lo que le dé la gana y tú feliz y contento, pues es mejor que hablen de ti que ser ignorado toda tu vida.

¿Y cómo adquieres esa autoestima? Desde casa, con una familia bien carrilluda, que dice las cosas como son, a la pepa pepa y al pito pito. Por ejemplo, mi hermana es muy bonita, adolescente, juventud divino tesoro, pero una que otra vez hay que bajarle los humos, así que le aviento una ligera "crítica constuctiva"  para que se aplaque, pero cuando noto que se está agüitando le digo, "Eyt, no te tomes a pecho que eres una fresa de la 4, mejor que aprendas el bullying con la familia y no en otro lado". Y ya se pone feliz.

Igual mi hermano, años años le dije que era adoptado, le demostré con pruebas que era muy diferente al resto de la familia, le dije que era el único moreno y que qué raro que mi mamá cuando "supuestamente lo tuvo", tuvo complicaciones en el embarazo, pregúntale le decía. Y le preguntó, "mamá , ¿es cierto que batallaste para tenerme?", "sí", dijo ella muy feliz. Y el comprobó que sí era adoptado, aunque después mi mamá lo desmintió y le compró un nintendo. Pero gracias a esa situación ahora es un hombre de bien, que no se agüita por nada, que aunque le diga que es un nerdo que vive en su cuevita tecnológica y tenía toda la finta para ser bullyeado jamás lo fue, ni lo será. Y aunque le diga "joto" con todo un novia al lado, tampoco se sentirá triste. Eso mis amigos es ser una persona de bien y con muy alta autoestima.

Y yo también he recibido mis enseñanzas gracias a mi amiga de toda la vida, quien desde el kinder me dijo que parecía payasa por mi coordinado con monitas maquilladas y gracias a eso ahora soy una fashion icon (pa' que vean lo que es autoestima jajajajaja) También me dijo que si conocía el Winnie de Pooh y yo inocentemente a mis ocho años le dije que prefería a Tiger, yu ju ju ju juuu (8), carrilla que me acompaña hasta la fecha, todo porque fue en la prepa cuando comprendí el chiste. Pero eso señores, me hizo una mujer de bien.

Así que si ustedes son una causa perdida que no aguanta la carrilla, piensen en las próximas generaciones y apoyen desde casa a los niños para que se conviertan en personas de bien. Tomen el ejemplo de estos buenos padres.








No hay comentarios:

Publicar un comentario